Va. Sin mucho preámbulo, que ya habréis visto que me enrollo.
Despliega el leer más si el título te ha dejado con la intriga. Aviso, entrada muy matemática (con moraleja al final).
Va. Sin mucho preámbulo, que ya habréis visto que me enrollo.
Despliega el leer más si el título te ha dejado con la intriga. Aviso, entrada muy matemática (con moraleja al final).
Todos (o la mayoría) habrán experimentado la frustración de estar realizando cuentas pero no entendiendo el trasfondo de las mismas. Esas dichosas demostracciones por inducción. O por reducción al absurdo. O partir de unos axiomas y derivar el resto, sin entender nada. Cuando empiezas a estudiar matemáticas, el nivel de abstracción requerido puede hacer que … Leer más
Si algo me flipa de la física es su capacidad para, con ecuaciones sencillitas, aproximar la realidad. Es como tener en tu mano un superpoder para entender el mundo. Pero todo superpoder conlleva una gran responsabilidad.
O mejor dicho, una gran carga.
Y es que a todos los físicos nos lastra el querer calcular cosas. Oyes un dato chulo y enseguida una de tus cejas se alza y piensas: «Hmmm, y eso, ¿cómo se cálcula?»
Eso mismo me pasó hace poquito recordando el siguiente dato que leí en algún libro divulgativo (que ahora no recuerdo, o de cuyo nombre no me quiero acordar), y es que:
La luz que se crea en el centro del Sol tarda miles de años en salir de él
Y dirás: «¿miles de años? Pero si yo sé que del Sol a la Tierra tarda ocho minutillos. ¿Qué está pasando aquí?»
Pues en esta entrada vamos a entender porqué ocurre y ver cómo este fenómeno se puede modelar de manera muy sencillita, y con suerte aprender algo de física por el camino.
Al lío.
«Si pudiera volver a empezar mi estudios, seguiría el consejo de Platón y empezaría con las matemáticas.» Galileo Galilei
En esta entrada vamos a estudiar las simetrías en física. Cómo se ven en las ecuaciones, cómo se describen matemáticamente y los tipos de simetrías. Por el camino aprenderemos un poquito de teoría de grupos (el lenguaje de las simetrías), nos las veremos con el teorema de Noether y entenderás por qué podrías explotar si le chocaras la mano a un extraterrestre. Al menos espero que con esto último te den ganas de clicar en el «leer más» 😛